Instalaciones químicas: ¿Objetivo principal para terroristas? Soluciones de la marca italiana CIAS
La industria química desempeña un papel importante al producir beneficios y servicios, así como dar empleo a miles de personas; pero también es un objetivo muy atractivo para los terroristas.
El ataque directo o el sabotaje terrorista a las plantas químicas puede tener dos resultados principales absolutamente perjudiciales: El coste humano. y las consecuencias económicas.
La seguridad contra dicho riesgo debería abordar tres puntos claves para evitar la vulnerabilidad:
1) Seguridad del transporte
Es fundamental asegurar el sistema de transporte de los productos químicos a las plantas, así como las propias instalaciones de almacenamiento. Un ejemplo sería la protección del vallado cercano a las vías férreas. CIAS apuesta para ello por la tecnología MEMS. Ésta no se ve afectada por las potentes vibraciones causadas por un tren en marcha, es fácil de instalar y puede gestionarse a distancia.
2) Seguridad física en instalaciones fijas
La creación de muros invisibles para proteger el perímetro de las instalaciones. La propuesta de CIAS para conseguirlo y evitar intrusiones graves, se basa en integrar la protección con barreras perimetrales microondas que disponen de máxima fiabilidad y tienen bajo mantenimiento. Estas soluciones no se ven afectadas por las condiciones meteorológicas y están preparadas con una interfaz de puerto IP.
3) Amenazas cibernéticas.
Crear un protocolo IP de ciberseguridad para una integración total. La gama completa de interfaces IP de CIAS ofrece PIDS en una LAN cibersegura mediante la integración del estándar 802.1X para el protocolo IP, que proporciona protección contra virus, malware o ataques de personas.